Que a veces nos suceden cosas tristes, desagradables o
catastróficas es un hecho. Y otras tantas que nos suceden son maravillosas.
Pero parece que estás últimas se empequeñecen cuando las comparamos por las
primeras. Quizás sea una de las muchas manías del ser humano, y es que puedo
decir que he conocido a más personas negativas que aquellas que tienen una
visión positiva. Pero ¿por qué sucede de esta manera?¿No parece más sencillo
intentar ver el lado bueno de las cosas? Lo cierto es que lo que sucede es
completamente al revés: lo difícil es lograr ser positivo y, como dice Punset,
levantar la barbilla hacia el cielo cuando sucede algo malo o nos encontramos
con algún problema. Es difícil sonreír, sobre todo, cuando parece que el mundo
se nos viene encima. Pero es que a veces sucede así. Te encuentras perdido y
sin salida aparente ¿verdad?
Por eso, cuando ayer asistí a ver la película El Lado Bueno de las Cosas me sentí
identificada con la historia y los sentimientos de los protagonistas. Pero es
que creo que eso nos pasó a todos los que estábamos en la sala.
El filme, que se estrenará en los cines españoles el próximo
18 de Enero de 2013, logró dejarme sin palabras. Ya había escrito una entrada
introduciéndoos la superproducción protagonizada por Bradley Cooper y Jennifer
Lawrence (leed más en - http://carmenjimenezv.blogspot.com.es/2012/12/todas-las-cosas-tienen-su-parte-buena.html)
pero creo que el director, David O.
Russell, ha realizado un trabajo inmejorable. El que fuera director de
películas como The Fighter en 2010 y Extrañas
Coincidencias (2004) ha llevado a
la gran pantalla una historia que, no siendo especialmente sorprendente, cumple
con todos los objetivos para los que ha sido creada.
Centrada en Pat (Bradley Cooper), que acaba del salir
del psiquiátrico en el que ha permanecido recluido 8 meses por pegar
violentamente al amante de su exmujer, Nikki,
regresa al hogar familiar donde sus padres le esperan con miedo a que los
problemas mentales salgan de nuevo a la luz. Pat intenta mantener una actitud
positiva ante las cosas y esta decidido a recuperar a su exmujer pero, ¿qué
pasará cuando se encuentre con Tiffany
(Jennifer Lawrence) la chica
problemática del barrio que promete ponerle en contacto con Nikki a cambio de
que él le ayude a ganar un concurso de baile? ¿Descubrirá Pat el lado de bueno
de las cosas?
Cargada de momentos dramáticos en los que se nos muestra las
situaciones complicadas y desastrosas en las que nos podemos ver envueltos, el
filme tiene una duración 122 minutos y da para mucho. Si bien en el principio
el ritmo narrativo puede resultar algo lento, poco a poco la película coge
velocidad y mete al espectador en la trama. Los momentos cómicos están
relaciones con cosas que se viven en el día a día y hay muchas escenas que
logran sacarte una sonrisa (o siete).
Por su parte, la actuación de los actores me parece
inmejorable. Sobre todo si hablamos de Bradley
Cooper, que logra que el espectador se sienta identificado con el
protagonista y con la obsesión que padece por obligarse a sí mismo a ser
positivo. Por otro lado, Jennifer
Lawrence no ha dejado de sorprenderme. Sí es verdad que no he podido dejar
de ver a Katniss Everdeen cuando
miraba a la pantalla pero me he encontrado con una actuación muy cercana y
llena de fuerza. Pero no debo dejar de mencionar a Robert De Niro, que me ha dejado con la boca abierta al meterse de
nuevo en el papel del padre del protagonista.
La película es un canto a que las cosas deben salirnos bien
en algún momento. Destaca la exaltación de la positivad y la utilización de una
banda sonora que apela a los sentimientos del espectador y a sus emociones. Me
ha resultado interesante la enorme utilización del primer plano a lo largo del
filme, algo a lo que no solemos estar acostumbrados y que sin duda cumple el
objetivo de meter al espectador dentro de la piel de los protagonistas.
Y digo que es una comedia romántica, sí. Pero muy actual,
muy cierta. Sin ese ambiente rosa fucsia que suele rodear a este género
cinematográfico. Un MUST-SEE del año que viene. Porque no hay nada de malo en
dejarse llevar y ser capaz de ver el lado bueno de las cosas.
Carmen Jiménez V.
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